martes, 15 de mayo de 2007

Reseña de la mesa redonda Asociacionismo y colegio en el VI Encuentro Nacional de Estudiantes de Traducción e Interpretación (Crónicas del ENETI)

Junto con AIIC, ACETT y la Red de Traductores e Intérpretes de la Comunidad Valenciana, Asetrad participó el pasado 23 de abril en la mesa redonda Asociacionismo y colegio con motivo del VI ENETI (Encuentro Nacional de Estudiantes de Traducción e Interpretación).

El propósito de este encuentro nacional es propiciar el diálogo, el debate y el conocimiento mutuo de profesionales y estudiantes que proyectan incorporarse a nuestro mercado.

Tras una breve presentación de cada asociación, los representantes de todas ellas hicieron hincapié en su cometido encaminado a vencer el proverbial aislamiento de traductores e intérpretes, contribuir a la promoción social de sus profesiones y propiciar la mejora de sus condiciones laborales.

Asetrad habló de la labor de sus comisiones, de los descuentos en la adquisición de libros y programas informáticos, de su foro jurídico, de su lista de distribución, de sus cursos de formación, etcétera.

En el turno de preguntas, nuestros futuros colegas se interesaron, entre otros asuntos, por la instauración de un colegio profesional de traductores e intérpretes.

Por lo que parece, el alumnado de traducción e interpretación tiene la creencia de que nuestra profesión se ve perjudicada por el intrusismo.

Los representantes de las asociaciones expusieron los siguientes extremos:

  • el mercado de la traducción es internacional: el traductor puede trabajar para agencias y empresas situadas en un país distinto del suyo propio y que no estarían sujetas a la jurisdicción de tal colegio;
  • un colegio profesional carece de competencia para regular tarifas;
  • la competencia en materia de colegios corresponde a las comunidades autónomas, de modo que no solo habría que crear uno, sino diecisiete;
  • la licenciatura en traducción e interpretación es una vía para adquirir (parte de) los conocimientos necesarios para el ejercicio de la actividad de traductor o intérprete, pero no la única.

De lo que parece colegirse que la instauración de un colegio profesional de traductores e intérpretes no redundaría en la consecución de los objetivos que parecen perseguirse. Se arguyó que dichos objetivos parecen más bien lograrse hoy día:

  • siendo conscientes de que, en el caso de los profesionales autónomos, es cada cual quien «regula» (establece) sus propias tarifas, fundamentalmente a la vista del valor que se atribuye a sí mismo y de los servicios que es capaz de prestar en cierto mercado; para ello es menester relacionarse con otros colegas y compartir información (cometido que Asetrad y otras asociaciones llevan a cabo);
  • no compitiendo en precio, sino en calidad, para lo cual también es primordial el manejo de instrumentos de trabajo como las memorias de traducción, el dominio exquisito del propio idioma y la formación en general, a los cuales también contribuye nuestra asociación celebrando cursos y facilitando la adquisición de material (obras de consulta, programas informáticos, interacción entre colegas, etcétera).

Angel Espinosa Gadea – Representante de Asetrad en ENETI 2007

No hay comentarios: